¿Probablemente ya has escuchado que el perdón nos hace libre? Nos repiten la frase que el perdón es liberador y que te ayuda a sanar un corazón herido. Pero, ¿qué pasa cuando alguien ha lastimado tan fuertemente y ha causado un trauma en la vida? La realidad es que para estas personas no es tan fácil hablar del perdón. Jesús mismo fue uno de los maestros que nos habló del perdón y hasta dejó un gran legado con la frase “Señor perdonalos porque no saben lo que hacen”.
En lo personal encuentro que el perdón es un tema un tanto delicado, ya que las circuntancias de cada persona son únicas en su vida y como perciben y experimentan los acontecimientos en su vida es diferente. Quizás al leer esto pensaras que no estoy de acuerdo con el perdón, pero permitéte leer todo el contenido. El mensaje que quiero llevar más que educar es reflexionar sobre esta poderosa energía que es el perdón y el sentimiento que nos deja en nuestro interior cuando nos damos la oportunidad de elegirlo en nuestras vidas.
Como mencioné, cada persona es libre de elegir a quien perdonar, sin embargo tengo que decirte que el perdón no es olvidar, ni minimizar lo ocurrido, ni tan siquiera es reconciliación, sino es el acto de soltar algo y no cargarlo en el interior. El perdón es un regalo que nos damos a nosotras mismas en el momento que decidimos dejar ir. En ocasiones nos quedamos ancladas a las experiencias del pasado y eso conlleva que no abracemos las cosas nuevas de la vida.
Por mucho tiempo mantuve muchos coraje con distintas personas que me habían lastimado. Algo que me enojaba era que esas personas habían continuado con sus vidas de los mas bien y yo era la que estaba llena de odio y dolor. Cada cosa que me acordaba a esas situaciones me ataban a un pasado. Hasta que decidí perdonar y dejarlo ir de mi corazón. No lo hacía para ellos, lo hacía para mi. Fui entendiendo que el perdón me hacía cada día más libre de pensamientos que activaban mi sistema nervioso envenenando mi sangre. Entendí que el regalo de amor más grande que puedo hacerme es entender que cada persona da lo que tiene y aprendí a ver esas personas con compasión. Entonces comprendí las palabras de Jesús, “Señor perdonalos porque no saben lo que hacen”. ¿Cuantas veces en la vida nos hacen daño, cuantas veces en la vida nos hacen cosas que no nos gustan? muchas verdad… En la vida siempre podemos salir lastimadas, sin embargo el amor de Dios, la enseñanzas de los grandes maestros son la muestra que seguir adelante y dejar ir ese rencor nos hace libre de ser esclavas del dolor.
Algo que leí en algun momento fue que perdonar es Perder y Donar. Definitivamente es perder nuestro orgullo y saber donar compasión. Sé que no es fácil darlo, sé que es un acto de valentía y fuerza. Te exhorto que reflexiones en el perdón y si estas pasando por una situación donde guardas en tu interior coraje, dolor, angustia, le pidas a Dios que toque tu corazón y te ayude a liberate de esa carga impuesta por el ego. El ego no quiere perder y en ocasiones debemos saber perder para ganar sabiduría, fortaleza y libertad.
Espero que este BLOG sea balsamo para tu alma, un espacio seguro para sanar y encontrar bienestar emocional, pero sobretodo que te ayude a expandir tu ser interior.
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Amayris Rodriguez, tu Coach & Mentora Holística
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